Resumen del Trabajo Fin de Máster en Bioconstrucción IEB de Ana Martínez Gutiérrez, alumna de la 25ª Edición
La cooperación, los sistemas dinámicos y la gestión de las necesidades son ingredientes básicos de los sistemas abiertos y evolucionan en los territorios de transmisión. Vivir en sistemas abiertos transforma nuestro modo de relación y conforma las formas de habitabilidad del futuro [3]. Sin embargo, en la actualidad prevalece una idea mecanicista de la naturaleza como fuente inanimada de recursos, explotable para el desarrollo ilimitado y el progreso económico; completamente desconectada de la relación entre las comunidades y los lugares que estas habitan [4]. No conocemos el proceso de transformación de los acuerdos entre comunidades y lugares, pero sí su viabilidad. Al desarrollarse, cada comunidad participa de los mismos desafíos que se supone debe resolver, ¿quién apoya a la comunidad?, ¿cómo se estructuran las propuestas?, ¿quién decide el funcionamiento de las plataformas?, ¿cómo se consolidan las cooperaciones?, ¿qué es una iniciativa colectiva? Estas cuestiones rara vez se abordan y pueden ayudar a definir las reglas de autoorganización. Las comunidades gestionan recursos en función de las características del lugar y procesan protocolos de acción en respuesta a las necesidades que se van presentando. Aunque la concepción no es la misma, los acuerdos de gestión de bienes comunes a largo plazo se nutren de las aportaciones que se han mantenido por prolongados periodos de tiempo [1].
Numerosas comunidades desarrollan acciones conjuntas para la gestión de los recursos de uso común. Así es que cada lugar es el contenedor de una comunidad vinculada históricamente al desarrollo de acciones relacionadas con el recurso del agua, la energía o el alimento. Prosperar como sistema que somos transforma necesariamente las estructuras, la fórmula se experimenta al incorporar las relaciones dinámicas en el largo plazo.
Aunque existe la incertidumbre ante futuros acontecimientos inesperados, como ocurre con el clima, la confianza en la repetición de los procesos vitales es esencial para las relaciones ecológicas de cuidado [2].
Intuitivamente entendemos que todo proviene de una fuente común: las estrellas y los planetas; los átomos; los microorganismos, los organismos simples, las plantas y los animales. El cosmos se asemeja a un organismo que a medida que se desarrolla crea nuevas estructuras. Podemos experimentar la creatividad humana como parte de este proceso creador. Esta visión refuerza la incidencia que ejerce sobre nosotros la innovación, la transformación y el desarrollo [4]. Desde luego, el diseño y la adopción de nuevos acuerdos para resolver conflictos relacionados con los recursos de uso común requieren de esa creatividad: es un intercambio que crea propiedades emergentes y nuevas posibilidades. Los gobiernos locales, regionales y nacionales pueden constituir una diferencia al proporcionar condiciones que mejoren la capacidad de estos colectivos para cooperar en diseños de gestión efectivos [1].
En el mundo inerte permanecer significa seguir estando, es decir, la estabilidad. En cambio, en el mundo vivo permanecer significa seguir vivo o, dicho de otro modo, la adaptabilidad. Si confirmamos que la materia inerte resiste la incertidumbre y la materia viva la modifica, se puede decir que la materia culta la anticipa. La anticipación es una función de los territorios de transmisión y permite transitar de la contingencia a la emergencia cultural [6].
Cuando un grupo tiene un interés común, o comparte un mismo propósito, sólo puede lograr y promover de manera adecuada sus iniciativas a través de la acción colectiva [1]. Las experiencias con moneda local, las de relocalización intencional, las propuestas energéticas comunitarias o las iniciativas de agricultura urbana, todas ellas, necesitan de las estructuras y los protocolos de un núcleo de articulación y la acción de los grupos impulsores [5]. Al dinamizar las iniciativas, tenemos margen para adaptar las acciones. Cada vez más comunidades se organizan para recuperar los recursos de uso común que han perdido, conservar los que existen y diseñar acuerdos para constituir nuevos recursos de uso común. Igual que hemos asumido las percepciones de la generación anterior, la siguiente podrá vivir la experiencia colectiva que impulsamos hoy. Al transformar la mirada, podemos significar las raíces.
Referencias:
[1] Ostrom, Elinor (1990), El gobierno de los bienes comunes. La evolución de las instituciones de acción colectiva, Ed. Fondo de Cultura Económica, 2015, P186-187, 350-353, 90.
[2] Puig de la Bellacasa, Maria, ‘Making time for soil: Technoscientific futurity and pace of care’, Social Studies of Science, octubre 2015, P691-716, extraído el 22 de enero de 2023 de: https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/26630817/
[3] Sennett, Richard, L’espai public. Un sistema obert, un procés inacabat, Ed. Arcàdia, 2014, P7-9.
[4] Sheldrake, Rupert (1990), El renacimiento de la naturaleza: la nueva imagen de la ciencia y de Dios, Ed. Paidós Ibérica, 1994, P33-35, 69-70.
[5] Transition Network (Ed.). La guía esencial para hacer la transición, 2018, P39-47, extraído el 15 de diciembre de 2023 de: https://transitionnetwork.org/wp-content/uploads/2018/11/La-Gu%C3%ADa-Esencial-para-Hacer-la-Transición-V.1.2.pdf
[6] Wagensberg, Jorge (2004), La rebelión de las formas. O cómo perseverar cuando la incertidumbre aprieta, Ed. Tusquets, colección metatemas, 2005, P61-73.
Figura:
Record II (Recuerdo II), 1987, de Antoni Tàpies. Fuente tomada del catálogo: Antoni Tàpies. Uma antológia 1959-1995, Ed. Fundação das Descobertas, 1996, P49.
Otras referencias relevantes:
Campos Fernández de Piérola, Santiago, ‘Gobernanza y participación en los comunes’, en Cuadernos Entretantos 3, Fundación Entretantos (Ed.), 2017, extraído el 19 de febrero de 2023 de: https://www.entretantos.org/wp-content/uploads/2018/02/CuadernoEntretantos3_ComunesGobernanza.pdf
Carson, Rachel (1962), Primavera silenciosa, Ed. Crítica, 2001.
Sennett, Richard, Juntos. Rituales, placeres y políticas de cooperación, Ed. Anagrama, colección Argumentos, 2012.
Soler, Carles y Fernández, Fernando, Estructura de la propiedad de la tierra en España. Concentración y acaparamiento. Fundación Mundubat y Revista Soberanía Alimentaria, Biodiversidad y Culturas (Ed.), 2015.
VVAA (2023), El municipalismo comunalista. Lecturas complementarias, Ed. Seminario de economía crítica Taifa, (no publicado).
Wahl, Daniel C. (2016), Diseñando culturas regenerativas, 2020, Ed. Ecohabitar.